Las avenidas súbitas en ramblas en un contexto de cambio climático

Resumen

Las ramblas mediterráneas, más extendidas espacialmente de lo que pudiera parecer, implican un riesgo de inundación significativo, históricamente subestimado debido a su flujo intermitente y al desconocimiento generalizado sobre su funcionamiento hidrogeomorfológico. Actualmente, sin embargo, la legislación europea reconoce la especificidad de estos sistemas, así como el riesgo que entrañan y aboga por profundizar en su conocimiento, adaptando la escala y la metodología a sus particularidades. Basado en la recopilación de varios trabajos realizados sobre la zona de estudio, el presente artículo aborda cuestiones clave de la conversión lluvia-caudal y generación de crecidas en ramblas, así como su evolución en el contexto actual de cambio ambiental.

El estudio se basa en datos originales cincominutales, registrados por la red SAIH-Júcar (Sistema de información hidrológica automática) y se realizó en dos fases. En primer lugar, se abordaron cuestiones clave que determinan la generación de crecidas a escala de cuenca, a partir de 138 eventos, registrados entre 1989 y 2018, en cuatro ramblas valencianas (Barranc del Carraixet, Rambla de Poyo, Riu Vernissa y Rambla de Gallinera). En segundo lugar, a una escala más general, se ha analizado la evolución de 698 episodios de lluvia en el territorio de la Demarcación Hidrográfica del Júcar, entre 1989 y 2016, con objeto de inferir qué consecuencias podrían suponer los cambios ambientales para la formación de inundaciones en ramblas. Los resultados muestran cómo estos cambios sugieren aumento del riesgo y disminución del recurso. Los episodios tienden a aumentar su intensidad y a disminuir la precipitación acumulada. Como consecuencia, la conectividad hidrológica se vuelve cada vez más dependiente de la intensidad de la lluvia, reduciendo así los umbrales de escorrentía y los tiempos de respuesta de la cuenca. Los cambios antrópicos potencian este efecto, porque reducen la infiltración y aumentan la escorrentía superficial y la erosión, al tiempo que aceleran el ciclo hidrológico. Por tanto, se anuncia un aumento en el desequilibrio proceso-forma debido al aumento de las fases morfogenéticas (por intensificación de los eventos) y a una disminución en la eficiencia de los episodios restauradores de baja magnitud. En consecuencia, el comportamiento de las ramblas bajo condiciones de cambio climático apunta, en primer lugar, hacia un incremento de las flash-floods intensas, cada vez más difíciles de gestionar con los instrumentos habituales de control de avenidas y, en segundo lugar, hacia una progresiva aridificación de estas cuencas mediterráneas.